Milán ha marcado un hito en Italia al convertirse en la primera ciudad que permite que las cenizas de las mascotas sean enterradas junto a las de sus dueños en los cementerios municipales.
Detalles de la Normativa
La nueva regulación abarca una amplia variedad de animales de compañía, incluyendo perros, gatos, roedores, pájaros, peces, tortugas, conejos, hámsters y hurones. Sin embargo, se establecen ciertas restricciones:
- Inscripciones en Lápidas: No se permite que el nombre de la mascota figure en la lápida del propietario. No obstante, se autoriza la colocación de una fotografía que muestre al difunto junto a su mascota, preservando así su memoria compartida.
- Ubicaciones Permitidas: Las cenizas de las mascotas pueden ser depositadas en celdas, columbarios o tumbas familiares, siempre que se respete la capacidad máxima establecida para cada tipo de sepultura.
Procedimiento para la Inhumación Conjunta
Para llevar a cabo el entierro conjunto, se deben seguir estos pasos:
- Solicitud Formal: Los familiares o representantes del difunto deben presentar una solicitud ante las autoridades municipales, indicando el deseo de inhumar las cenizas de la mascota junto a las del propietario.
- Certificación Veterinaria: Es necesario proporcionar un certificado veterinario que acredite la especie y el estado sanitario de la mascota, asegurando el cumplimiento de las normativas de salud pública.
- Coordinación con el Cementerio: Una vez aprobada la solicitud, se coordina con la administración del cementerio para programar la inhumación conjunta, garantizando que se realice de acuerdo con las regulaciones vigentes.
Perspectiva Cultural y Social
Esta iniciativa refleja un cambio significativo en la percepción de las mascotas dentro de la sociedad italiana, reconociéndolas como miembros esenciales de las familias. La concejala de Servicios Cívicos, Gaia Romani, destacó que esta medida es “un acto de civilización que muchos esperaban” y que responde al deseo de quienes consideran a los animales parte integrante de sus familias.
Consideraciones Adicionales
Es importante tener en cuenta que, en caso de traslado de los restos del propietario a otro lugar, las cenizas de la mascota deberán ser trasladadas conjuntamente. Si el nuevo destino no permite la inhumación conjunta, los familiares deberán hacerse cargo de las cenizas del animal.
Esta medida pionera en Milán podría inspirar a otras ciudades italianas y de diferentes países a adoptar regulaciones similares, reconociendo el profundo vínculo entre las personas y sus mascotas, incluso más allá de la vida.