Las bicicletas se han convertido en el medio de transporte más popular en las calles de Londres, superando a los coches y vehículos de alquiler privados. Las cifras figuran en un informe del Departamento de Medio Ambiente de la Ciudad de Londres. Y de este modo es el medio de transporte más importante de la capital inglesa. El informe señala que hubo “relativamente pocos cambios en la composición general del tráfico de vehículos entre 2019 y 2022, con la excepción de las bicicletas”.
Más ciclistas en Londres
Las bicicletas ya se habían destacado en 2019 como el modo de transporte más popular en las carreteras de la ciudad durante la hora pico, en 2019, pero los recuentos de tráfico de 2022 -realizados, como los anteriores, en otoño de cada año- representan la primera vez que han logrado el puesto número uno durante todo el día.
En el recuento de tráfico más reciente, realizado el 23 de noviembre del año pasado, los volúmenes de vehículos de motor durante todo el día se situaban en torno al 80% de los niveles anteriores a la pandemia, mientras que los volúmenes de ciclistas durante todo el día se situaban en el 102% de los observados en 2019.
Mientras tanto, el número de peatones se situó en el 63%, aunque el informe reconoció que caminar sigue siendo “con mucho, la principal forma en que las personas viajan por las calles de la ciudad“.
“Al igual que en 2019, los ciclistas en Londres representaron el modo vehicular más importante en las calles de la ciudad”, señala el informe.
Los cambios en el transporte luego de la pandemia
El impacto de la pandemia, que llevó a muchos empresarios del distrito financiero a animar a sus empleados a trabajar desde sus casas, también se muestra claramente en una tabla incluida en el informe. Allí se muestra cómo los distintos modos de desplazamiento en 2022 se comparan con las cifras observadas en 2019, y solo la bicicleta muestra un crecimiento.
No está claro por qué el uso de la bicicleta por sí solo aumenta la tendencia, aunque las razones pueden ser la reducción de los niveles de tráfico motorizado y las mejoras en las infraestructuras, que han impulsado a más personas a desplazarse en bici.
Algunos ciclistas pueden haber comprado una bicicleta por primera vez durante la pandemia y la eligieron para moverse en lugar de hacerlo con el transporte público.
También aumentó en Londres la disponibilidad de bicicletas de alquiler, incluidas las eléctricas, para sustituir, por ejemplo, a los desplazamientos a pie en la parte final del trayecto desde una terminal de ferrocarril hasta el lugar de trabajo.
En los últimos años, la ciudad de Londres trató de hacer sus calles más seguras para ciclistas y peatones, en reconocimiento del gran número de personas que se desplazan a pie desde los centros de transporte público hasta su lugar de trabajo, o que salen a comer algo a la hora del almuerzo.
En su intervención más destacada para proteger a los usuarios vulnerables de la vía pública, que también está relacionada con los objetivos de su Plan de Acción Climática, el ayuntamiento de Londres puso en marcha, en 2017, un plan para excluir a todos los vehículos, excepto bicicletas y autobuses de varias zonas de la ciudad.